Senda de los Cazadores | Faja Pelay | Cola de caballo | Pradera de Ordesa


Visitamos el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido en los Pirineos aragoneses. Realizamos una de las rutas más conocida: la que desde la Pradera de Ordesa sube a la Faja Pelay por la Senda de los Cazadores y se dirige hasta la cascada de Cola de Caballo. Regresamos a la Pradera junto al río Arazas. Comentaros que se recomienda realizar este recorrido en la dirección descrita y no en la contraria por el fuerte desnivel de la Senda de los Cazadores.
🚗 En verano la carretera de acceso a la Pradera de Ordesa esta cerrada a los vehículos privados, así que hay que ir a Torla y dejar el coche en la entrada del pueblo, donde hay un gran aparcamiento desde el que salen autobuses hacia la pradera.
Desde la Pradera de Ordesa tomamos el camino que sale a la derecha y cruza el río Arazas por un puente. Seguimos las indicaciones para encontrar la Senda de los Cazadores. Es un camino, muy pendiente y serpenteante, que sube por la ladera de la montaña a través de un gran bosque de hayas. Se salva un desnivel de más de 600 metros hasta alcanzar el Mirador de Calcilarruego, desde el que tenemos unas esplendidas vistas sobre el Valle de Ordesa y sobre el Circo de Cotatuero. Cerca del mirador hay un pequeño refugio.
📌 La Senda de los Cazadores fue creada por los cazadores locales que acudían a los pastizales de la Sierra de las Cutas en busca de sarrios para cazarlos.
Senda de los Cazadores

Mirador de Calcilarruego

El recorrido enlaza con el sendero de la Faja de Pelay que, manteniendo la altura ganada, avanza por una de las cornisas meridionales del Valle de Ordesa. Cuando llegamos al fondo del Circo de Soaso obviamos el Camino de las Mulas, que se desvía a la derecha hacia el refugio de Góriz, y bajamos suavemente hacia la cascada de la Cola de Caballo.

Faja Pelay

Cola de Caballo

Tras la típica parada en la Cola de Caballo, emprendemos el camino de regreso por el Camino del Valle junto al río Arazas. El camino es cómodo, en algunos casos empedrado y pasamos junto a las cascadas que conforman las Gradas de Soaso, las cascadas del Estrecho y de la Cueva.

Vamos descendiendo siguiendo la pista atravesando un frondoso bosque de hayas donde hay una pequeña cabaña refugio. En este punto hay un panel informativo con las diferentes especies de aves que podemos observar en este lugar. Comentaros que en este lugar es muy fácil observar de cerca al trepador azul (sitta europaea).

Trepador azul

Continuamos la ruta y llegamos a un punto en el que la pista se divide en dos. Ambos caminos llevan a la Pradera de Ordesa siendo el de la izquierda más frondoso por estar en la parte más sombría del valle. Seguimos por la izquierda y cruzamos el río Arazas por el puente de Arripas. Ahora, el río queda a nuestra derecha y la izquierda hay un muro de piedras. A pesar del ruido del río pudimos escuchar el piar de unos pequeños polluelos de carbonero palustre (poecile palustris) procedente de un nido situado en un agujero del muro de piedras. Estuvimos un buen rato observando, desde la distancia, el ir y venir de uno de estos pájaros trayendo comida para sus poyuelos.

Retomamos la marcha y llegamos a la Pradera de Ordesa, el punto de inicio y fin de nuestra ruta.




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