Las moras, la fruta del fin del verano
Con la llegada de septiembre , en nuestros bosques maduran las moras en márgenes de caminos y torrenteras. Su coloración varía según la madurez del fruto, siendo inicialmente blanco verdoso pasando al rojo para convertirse en negro o púrpura oscuro. En casa, se deben conservar en el frigorífico, donde permanece en óptimas condiciones hasta 3 días. En definitiva, un aliciente más para salir, tomar el aire y comer estos frutos ricos en antioxidantes .