Encuentro con zorros en el Parc del Garraf
Una tarde de estas pasadas Navidades decidimos acercarnos al Parc del Garraf. Subimos en coche hasta el Pla del Querol y, aprovechando que el día estaba completamente despejado, pusimos rumbo hacia la Morella. Las vistas desde esta cima nunca decepcionan, así que caminamos tranquilamente, con la peque a cuestas en la mochila portabebés de montaña 👶, hasta alcanzar la cumbre.
Un encuentro inesperado: el zorro de la Morella
Al llegar a lo alto nos llevamos una sorpresa: un zorro estaba merodeando por la zona. Se detuvo a observarnos con curiosidad, lo que nos permitió hacer algunas fotos antes de que, aburrido de nosotros, emprendiera su camino montaña abajo. Este tipo de encuentros son especiales, pero requieren prudencia. Aunque los zorros puedan parecer amigables, nunca debemos acercarnos demasiado, ya que pueden transmitir enfermedades como la rabia.No era la primera vez que nos pasaba algo parecido en el Garraf. Durante una excursión anterior al Puig de la Mola también nos cruzamos con otro zorro, una especie que no solo está presente en el parque, sino que forma parte esencial de su equilibrio natural.
El zorro en el Parc del Garraf: una pieza clave del ecosistema
El zorro común (Vulpes vulpes) es, según los últimos estudios de seguimiento mediante fototrampeo, el carnívoro más abundante del Parc del Garraf. Aun así, las campañas más recientes han detectado una ligera disminución de avistamientos dentro del parque, un patrón distinto al observado en otros espacios naturales cercanos, donde su presencia ha aumentado.Comportamiento y adaptación en un entorno duro
El Garraf es un macizo kárstico seco, pedregoso y con poca agua superficial. A pesar de estas condiciones, el zorro ha demostrado una gran capacidad de adaptación.- Horarios: aunque son animales crepusculares y nocturnos, en el Garraf se observan cada vez más de día, especialmente cerca de zonas habitadas.
- Refugios: utilizan pequeñas cuevas, grietas en la roca caliza y madrigueras abandonadas de otros animales como espacios de cría y descanso.
El zorro es un oportunista alimentario, y en el Garraf su dieta varía a lo largo del año.
- Presas: se alimenta de conejos, roedores y aves, muy presentes en el parque.
- Frutos: también consume frutos mediterráneos como el palmito o la lentisca, contribuyendo mediante sus excrementos a la dispersión de semillas.
Dónde suelen verse en el parque
Los zorros del Garraf están relativamente habituados a la presencia humana, lo que explica por qué los avistamientos son frecuentes:
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En carreteras del macizo, cruzando o merodeando en busca de animales atropellados.
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Cerca de masías y límites urbanos, como las zonas de Sant Pere de Ribes o Sitges, donde algunos ejemplares buscan restos de comida.
Este comportamiento, sin embargo, implica riesgos para ellos: mayor exposición a enfermedades, accidentes y pérdida de conducta natural.
✔️Recomendaciones ante un avistamiento
Si te encuentras un zorro en el Garraf es fundamental actuar con responsabilidad:-
No ofrecerles comida, para evitar que asocien a las personas con recursos fáciles.
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Mantener la distancia y observarlos con calma; lo habitual es que nos miren unos segundos antes de desaparecer entre la maleza, tanto si estamos en la Morella como si caminamos por senderos como el GR-92 o el GR-5.
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