Ruta a la Torre mirador del Pla d'Escobairó | La Cerdanya
Si estáis buscando una escapada a la naturaleza para disfrutar de un paisaje alpino impresionante, la ruta al Pla d’Escobairó, en la comarca de La Cerdanya, es una opción que no podéis dejar pasar. Este recorrido corto pero desafiante os llevará hasta una torre mirador de madera situada a más de 1.700 metros de altitud, desde donde se contemplan vistas espectaculares de los valles y cumbres de los alrededores. Acompañadnos en esta aventura en la que subimos por el Camino 739, rodeados de un bosque de pino negro y el aire puro de la montaña.
Inicio de la ruta: desde Alp al corazón del bosque
Para comenzar esta aventura, nos dirigimos al municipio de Alp. Desde allí, tomamos la carretera GI-400 en dirección a la estación de esquí de La Masella. La ruta empieza en una de las curvas de esta carretera, donde encontraréis espacio para aparcar el coche. Este punto marca el inicio de una caminata que, aunque no es larga, presenta un desnivel pronunciado que pondrá a prueba vuestra resistencia.
La clave para no perderse es seguir las marcas amarillas y negras del Camino 739, bien visibles en los árboles. Este sendero es el que nos guía tanto en la subida como en el regreso, ya que el itinerario de ida y vuelta transcurre por el mismo trayecto.
El Mirador del Pla d'Escobairó: naturaleza y vistas impresionantes
Al alcanzar el mirador, os encontraréis con una impresionante torre de madera que se alza como una atalaya en medio del paisaje alpino. Desde lo alto, los mostradores de orientación con fotografías os ayudarán a identificar las principales cumbres, valles y pueblos que se extienden a vuestros pies. Es un lugar perfecto para disfrutar del silencio de la montaña y tomar fotografías que capturen la belleza del entorno.
Además, en las inmediaciones del mirador hay una pequeña área de picnic, ideal para hacer una pausa y reponer fuerzas mientras disfrutáis de las vistas y el aire fresco.
Un momento mágico: la nieve en el mirador ❄️❄️
Cuando llegamos al mirador, la montaña nos regaló un instante mágico: comenzó a nevar suavemente, cubriendo el entorno con una capa blanca efímera. Fue un recordatorio de la pureza y la belleza cambiante de este paisaje. Si tenéis la suerte de visitar este lugar en invierno o a finales del otoño, es probable que podáis vivir momentos similares.
🗺️ Mapa de la ruta |
🎬 Vídeo de la ruta |
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